PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Cuando el Covirán Granada salte a la cancha a comienzos del próximo mes de septiembre para la disputa de sus primeros compromisos amistosos tendrá el apoyo desde las gradas de unos Jesús Fernández y Pablo García que, a buen seguro, prolongarán su legado deportivo convirtiéndose en dos nuevos aficionados para la ya extensa masa social del Palacio de los Deportes.

Dos jugadores que han marcado una época en el conjunto nazarí y que cederán de este modo el testigo a un equipo que contará ese día en su roster con un nuevo aliado de la tierra, un Eloy Almazán al que el destino parecía tener reservado un lugar importante en el vestuario del conjunto rojinegro. Y es que su nombre fue uno de los primeros en estamparse sobre un carnet de socio en la historia de un equipo al que Eloy se abonó en aquel verano de 2013 en el que la entidad se inscribió en Primera Nacional a la búsqueda de un nuevo futuro.

De esa manera, el jugador mostraba su apoyo a un proyecto que comenzaba a ver con buenos ojos y al que no ha perdido de vista ni un solo día hasta terminar por estampar una nueva firma en las oficinas del club. En esta ocasión la que le ha llevado a retornar a casa década y media después de su último paso por una ciudad con la que ansía poder cumplir el doble objetivo de regresar de la mano a una Liga LEB Oro que echará este año de menos a uno de sus apellidos más habituales.

Eloy: “Es el momento idóneo para regresar y echar una mano”

Viajamos hasta los pies de la Alhambra para encontrarnos con un recién casado Eloy Almazán que aprovecha estos días para asentar las bases de la que será su nueva vida familiar y deportiva en la ciudad que le vio nacer. Junto a él echamos la vista atrás para intentar encontrar la última ocasión en la que disputó un encuentro como local en su Granada natal antes de abordar lo que será su reencuentro con un Palacio de los Deportes que le aguarda ya con los brazos abiertos.

Quince años después, Eloy Almazán regresa a casa. ¿Satisfecho?

“Sin lugar a duda porque desde cadete de segundo año no había vuelto a jugar ni un solo partido como local en Granada así que para mí es toda una satisfacción el poder volver ahora a casa y el poder empezar aquí una nueva etapa deportiva. Este es un club que he seguido mucho desde el principio, me hice socio casi desde sus primeros días de vida y les he apoyado siempre que he podido. Ahora que han vuelto a recuperar la esencia del baloncesto en la ciudad y buscan un nuevo paso al frente para intentar retornar a la Liga LEB Oro por lo que he considerado que era el momento idóneo de poder regresar para echar una mano”.

Has sido el primer fichaje del verano en la Liga LEB Plata. Cuando uno decide no esperar más y renunciar tan sumamente pronto a una LEB Oro en la que a buen seguro hubieras tenido opciones debe ser porque se tienen las cosas muy claras…

“Sin duda. Este último año en Melilla fue complicado para mí a nivel anímico ya que estábamos afrontando una temporada y unos playoffs con una ilusión mucho menor que en años anteriores ya que sabíamos que tras haber conseguido el ascenso no había sido posible consumarlo. Yo soy un jugador sumamente competitivo y necesito luchar por objetivos y retos importantes que creo que en Granada pueden tener un camino y un recorrido muy diferente. Desde el principio Pablo Pin ha apostado fuerte por mí demostrándome mucha así que cuando un club quiere que estés y tú quieres estar no hay mucho más que hablar”.

Después de siete temporadas cambias la camiseta azul y blanca por el rojo y negro, ¿se hará raro durante la noche del estreno?

“Seguramente porque han sido muchos años allí… El fin de semana pasado estuve en Melilla en la boda de Alejandro Alcoba y cuando hablaba con Manu Gavilá (jefe de prensa) o la gente del cuerpo técnico se nos hacía raro el hablar del próximo año sin que esto supusiera un trabajo en común. Granada es mi casa pero estoy seguro que esa primera noche en el Palacio se me va a hacer un poco rara aunque estoy seguro de que será el comienzo de una etapa muy deseada y que traerá muchas alegrías para todos”.

¿Preparado para ejercer como uno de los líderes de un vestuario que había quedado huérfano de nazaríes con la retirada de Pablo y Jesús?

“Eso es un poco lo que Pablo buscaba también de mí cuando me llamó. El me conoce desde hace mucho tiempo y sabe que por mi experiencia de los últimos años he manejado bien el vestuario del Melilla Baloncesto. Sabe que soy un jugador al que le gusta el buen ambiente y que eso es un valor importante a la hora de fichar a un jugador ya que este año, con la marcha de Pablo y Jesús, se perdía una parte importante de ese sentimiento granadino que yo espero poder mantener esta temporada. Quiero contagiar al vestuario de ese sentimiento y de la responsabilidad que supone el vestir esta camiseta”.

El año pasado el equipo levantó la Copa LEB Plata y se quedó en las semifinales por el ascenso a la Liga LEB Oro. ¿Sería aventurado hablar ya de candidatura o debe ser una prioridad para este equipo?

“Está claro que para mucha gente el Covirán Granada va a tener que subir sí o sí esta temporada. Somos una ciudad histórica del baloncesto, estamos metiendo entre 5.000 y 6.000 personas en el pabellón y todo apunta a que vamos a tener un equipo muy competitivo pero nosotros no queremos pensar en mucho más allá que en el ya famoso partido a partido. Queremos ir día a día y pensar en cada encuentro como el más importante para que, a partir de ahí, sea la competición la que dictamine en qué lugar podemos movernos y hasta dónde podemos aspirar. Debemos trabajar bien y hacer las cosas con cautela para poder estar arriba y poder luchar por ese ansiado ascenso”.

¿Qué nos puedes contar de esas primeras conversaciones con Pablo Pin? ¿Qué tipo de equipo vais a ser y qué vamos a ver sobre la pista?

“En un principio la idea de juego va a cambiar respecto al año pasado porque, por aquel entonces, el equipo no tenía un tres alto como van a tener ahora conmigo. El equipo lo pasó mal esa posición durante los Playoffs y ahora se pretende que esa posición quede cubierta dando forma a un equipo que se complemente entre sus líneas. Por ahora tenemos ya confirmada una buena pareja de bases con la continuidad de dos jugadores como Carlinhos de Cobos y Carlos Corts que se complementan muy bien y estará bien compensado en el juego interior con la continuidad de Bortolussi. A partir de ahí el equipo estará compuesto por gente trabajadora, que llegue a Granada con ganas de aprender y que se empape de esa filosofía de trabajo que a Pablo tanto le gusta”.

Y todo esto sabiendo que se tiene la responsabilidad de defender el sentimiento de 6.000 espectadores…

“Eso debe ser lo más importantes para nosotros. Durante toda mi carrera siempre he estado acostumbrado a luchar por objetivos importantes vistiendo la camiseta de equipos que querían estar arriba pero nunca antes he tenido la posibilidad de jugar con el respaldo de 6.000 espectadores. Si eso ya es de por sí un orgullo imagínate si toda esa gente acude al pabellón para defender al equipo de tu ciudad. Para mí es una gran responsabilidad y, sobre todo, un gran orgullo, algo ilusionante y que va a disparar los sentimientos”.

Estadísticas de la temporada - Eloy Almazán:

Ficha completa
Partidos jugados: 31
Minutos: 17,11 p.p.
Puntos: 5,2 p.p.
Rebotes: 2,7 p.p.
Asistencias: 0,9 p.p.
Recuperaciones: 0,4 p.p.
Tapones: ---
Faltas recibidas: 1,1 p.p.
Valoración: 4,7 p.p.

Trayectoria deportiva - Eloy Almazán:

Categorías Inferiores: CB Granada y Maristas
2002/05: Unicaja Málaga (Liga EBA)
2005/06: CB Montilla (Liga EBA)
2006/07: Caja Rioja (LEB Plata)
2007/08: Salsas Musa Ciudad de Córdoba (LEB Bronce)
2008/09: Cajasur Córdoba 2016 (LEB Plata)
2009/10: Fundación Adepal Alcázar (LEB Plata)
2010/11: Fundación Adepal Alcázar (LEB Oro)
2011/17: Melilla Baloncesto (LEB Oro)
2017/18: Covirán Granada (LEB Plata)