ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Un primer cuarto muy igualado y con los ataques imponiéndose a las defensas. Un segundo cuarto para el Bàsquet Girona, con Sabat a los mandos y un juego interior de gran talento. Un tercer cuarto en el que los jugadores de la casa (Juaristi ISB cuenta con 8 locales en la plantilla de 12) aguantaron en el marcador. Y un último en que Spencer Reaves (a la postre, MVP de la Copa) decidió el título desde los 6.75. En un Municipal de Azpeitia que registró un gran ambiente, se vivió un excelente final en la que los locales llegaron a recuperar 12 puntos de ventaja (8 en el último cuarto).

Comenzó el partido a toda velocidad, con los dos equipos con muchas ganas de entrar pronto en una final siempre ilusionante. La igualdad marcó estos primeros minutos con un intercambio espectacular de canastas entre Ibon Guridi y Albert Sabat (9-8 min 3). Dijkstra anotaba un triple (11-13) segundos antes de que lo respondiera Lowrence (14-13) para el disfrute de los aficionados que se acercaron a Azpeitia y los que lo veían por Facebook Live y CanalFEB. Un primer cuarto en el que aparecieron los jugadores importantes de ambos equipos: Jakob Lowrence, por los locales; y Antonio Hester por los visitantes. Un cuarto muy entretenido que se cerró con un resultado de 19-20.

Pero todo cambió en el segundo cuarto. El Bàsquet Girona apretó en defensa y consiguió las primeras ventajas importantes. Y lo fueron más, si cabe, porque provocaron las dudas en el Juaristi ISB, que se encerró en sí mismo tras un bloqueo ofensivo. El marcador se estiraba a favor de los catalanes (que contaron con la presencia de más de un centenar de fieles desde Girona). Un 0-10 en cinco minutos ponía un preocupante 19-30, aunque los de Iñaki Jiménez lo solventaban subiendo la intensidad defensiva, aunque esa pasión seguía provocando pérdidas de balón. Al descanso se llegó con un 29-37 con un tiro sobre la bocina de Reeves.

Tras el paso por los vestuarios los jugadores en la cancha recordaban que estábamos ante una final. Ruido en las gradas, protestas en los banquillos (hasta dos técnicas se pitaron por este motivo) y sucesión de errores y aciertos en la pista. Salazar-Beraza-Guridi, el tridente de casa, tiraba del carro en un momento complicado, con Albert Sabat volviendo a superar los 10 puntos de ventaja (42.53 min 28) tras un triple lateral. El Juaristi ISB necesita mantenerse en el choque, para apretar en los últimos minutos, y ese objetivo estaba medio cumplido (47-55).

El porcentaje subía en el inicio del último cuarto con dos triples casi consecutivos (Reaves y Lowrence) que obligaba a Alex Formento a solicitar su primer tiempo muerto. El 53-57 levantaba al público, pero quien está acostumbrado a este ambiente es un Albert Sabat, que anotó un triple muy forzado al límite de la posesión que restó confianza a sus rivales. Era el momento de uno de los jugadores más decisivos de la competición: Spencer Reaves anotó dos triples para poner el 61-60 a falta de cuatro minutos. Era el jugador que pedía el balón, el que quería el título y el que anotó 5 triples en el último cuarto. No fue el más valorado, pero sí el MVP de una Copa que se quedó en Azpeitia en un partido histórico para un club como el Iraurgi.